ESPECIES DESAPARECIDAS O EN PELIGRO DE EXTINCIÓN
Según la tradición oral, el primer Ariki de la isla, Hotu Matua, habría traido todas las plantas de valor alimenticio que se conservan hasta hoy día, y que fueron rápidamente cultivadas y adaptadas a las condiciones ambientales que ofrecía la isla. Eran:
Kumara (Camote), uno de los tubérculos principales que sustentó la alimentación diaria en tiempos antiguos, convirtiendose en una indispensable comida, tanto en forma cocida, como en forma natural a fin de satisfacer la sed. Su plantación se realizaba en pequeños montículos de tierra o en recintos agrícolas y la cosecha se determinaba en base al crecimiento de los brotes y hojas.
Taro, Kape: Fueron plantas cultivadas intensamente en los lugares agrícolas, entre rocas y amontonamientos de piedra, pues necesitaban mayor humedad para su crecimiento. Al igual que el camote, el taro fué clasificado de acuerdo a sus formas y tipos de tubérculos y hojas de diversas variedades existentes.
Ti: Se identifica por ser una planta muy abundante. En tiempos antiguos cumplió una labor muy importante en lo alimenticio y materia prima para diversos propósitos. Las raices de esta palma de forma alargada y gruesa poseen un sabor muy dulce cuando se cuecen en un curanto, o se consume su jugo de manera natural. Como materia prima servía por ejemplo para entrelazar los pastos de las techumbres de las viviendas. Actualmente se encuentra en peligro de extinción.
Toa, caña de azucar: Su agradable y apetitoso jugo, suplió en partes las necesidades de agua de la población. Pero el uso del jugo no sólo se limitó a dicho aprovechamiento, sino también como unguento o adhesivo por medio del cual se figaban los diversos pigmentos en el cuerpo o rostro y tambien sobre otras superficies. Para la preparación de la tintura, se mascaba la caña y el zumo originado era vertido en calabazas o cuencos de piedra que contenían el polvo carbonizado, luego se procedía a su mezcla definitiva. Las hojas por su parte sirvieron para cubrir las chozas.
Maika, plátano: Se cultivaba en forma extensiva en diversos lugares de la isla, con plantaciones ordenadas en hileras. También fueron cultivadas en manavai, especialmente subterraneos o en cavernas, para aprovechar mejor la humedad, protegerlas del viento y de los rayos solares. Para hacer nadurar más rápidamente las cabezas eran enterradas por algunos días, adquiriendo el fruto un sabor más dulce. Las hojas secas (kakaka), fueron usadas en diversas formas, sirviendo por ejemplo para cubrir las techumbres de las viviendas. Al igual que las especies anteriores, no existe claridad en cuanto al número de variedades presentes en tiempos antiguos.
Hue, Ipu Kaha, calabaza: Las calabazas fueron unas de las plantas cultivadas mencionadas tempranamente por los navegantes del siglo XVIII. Estas plantas fueron vistas creciendo en forma natural en grandes cantidades y también cultivadas hasta el presente siglo, pero hoy día practicamente han desaparecido. Sirvieron como alimento, pero su corteza fué la que recibió un mayor uso, como materia prima para la elaboración de utencilios para almacenar y transportar agua. Las más largas se utilizaban para guardar vestuarios, remojar la corteza del mahute y para cocer camotes.
Tavari: Fué utilizada por los isleños como plante medicinal para aliviar las alergias. Crece todavía en el interior del Rano Raraku, Rano Kau Y rano Oroi, junto a la totora y otras especies.
Pato: Sirvió para aliviar el dolor de estómago y hemorragias menstruales.
Puringa: Afecciones de la piel, sífilis, lepra.
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