EXERCISE 1

 

Vídeo: Lo que tú quieras oír

 

Sofía: ¡Más mono! ¿Sabes lo que me he dicho hoy? ¡Profe, profe, te he hecho un dibujo! Y me enseña un trozo de papel donde supuestamente salgo yo. ¡Imagínate! Un churro de color violeta que pone Sofía. Sí. No, mañana voy a ir…voy a comprar un marco y lo voy a colgar en casa. No, a Miguel no creo que le .................. No se fija en las paredes. Está todo el día con el ordenador. Sí, sí, viene hoy. Porque es que me parecía cutre hacer una cena rápida así que he pensado: compro una dorada. Le hago una dorada a la sal que le encanta y es más fácil de hacer que un guiso. Ana, perdona, es que no te estaba escuchando.
Miguel: Sofía, soy Miguel. Si estás en casa, por favor, coge el teléfono. Es urgente que .....................
Sofía: Ana, ¿te importa que te .................. en un momento? No, no, estoy bien. ......................, vale. ¡Hasta luego!
Miguel: Sofía, soy Miguel. Si estás en casa, por favor, coge el teléfono. Es urgente que ................... No estás. Sofía: ¡adiós! No sé cómo decirte esto. No, no voy a volver a casa. Ni esta noche ni ninguna otra. Es que tú no te das cuenta pero necesito que me ....... algo de tiempo porque tengo que pensar. Aunque sé que puede que no lo merezca, pero no quiero volver. Tú no te das cuenta. Estás con tus niños y tus plantas. Durante meses he pensado en que podíamos intentar salvar lo nuestro: pero no es verdad. No quiero ser un inmaduro y lo he sido mucho tiempo por no decirte lo que pensaba. Ahora creerás que soy un cerdo. Claro, yo  lo pensaría, pero pronto habrás hecho tu vida al margen de mí. Yo lo necesito. Necesito marcharme. Salir de esa casa. Ahora te echo de menos pero…pero pasará. Ya no te quiero. No quiero salvar lo que queda de nosotros. Siento, siento…no tener fuerza para decirte esto a la cara pero…si lo hablamos, me quedo. Y no quiero quedarme.
Ana: ¡Hola, Sofía! Soy yo. ¿Sabes ya cuándo vas a venir? Los niños me preguntan por ti. Bueno, luego te vuelvo a llamar. Un beso.
Ana: ¡Hola, Sofía! Llámame en cuanto puedas. Pero llámame, por favor. Estoy preocupada.
Ana: ¡Sofía!  Soy Ana. Mira, te llamo por  la escuela. Tienes que pedir una baja por depresión o no sé.  Pero no puedes seguir sin venir y no decir nada. Mira, Juan Carlos está mosqueadísimo. Yo le he dicho que estás enferma pero ya sabes cómo es. Además te vendría bien volver a trabajar y salir un poco, ¿no? Bueno, llámame cuando puedas. Un beso.
Miguel: Sofía, soy Miguel. Si estás en casa, por favor, coge el teléfono. Es urgente que .................. No estás. Sofía: ¡adiós! No sé cómo decirte esto. No, no voy a volver a casa. Ni esta noche ni ninguna otra. Es que tú no te das cuenta pero necesito que me........... algo de tiempo porque tengo que pensar. Aunque sé que puede que no lo .............., pero no quiero volver. Tú no te das cuenta. Estás con tus niños y tus plantas.
Miguel: Sofía, soy Miguel, Sofía. Necesito volver a casa…esta noche. Durante meses he pensado en salvar lo nuestro. Necesito volver. No quiero ser un inmaduro. He sido mucho tiempo un inmaduro por no decirte lo que pensaba: te quiero. Tú habrás hecho tu vida al margen de mí pero necesito volver a casa. Te quiero. Quiero salvar lo que queda de nosotros. Te quiero. Siento no tener fuerza para decirte esto a la cara. Te quiero. Te quiero.
Sofía: ¡No!

 

 

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